Si consultamos en la RAE el significado de deporte obtenemos lo siguiente: actividad física, ejercida como juego o competición, cuya práctica supone entrenamiento y sujeción a normas.La primera parte de la definición que relaciona el deporte con la actividad física ha generado un extenso debate en la comunidad del poker desde hace muchos años en el que ni los propios jugadores se ponen de acuerdo. Además de todos los beneficios obvios que conlleva la práctica cotidiana de ejercicio físico, el deporte tiene mucho más que enseñarnos a los jugadores de poker. Así que este debate meramente terminológico no va a impedirme relacionar el poker con otros deportes individuales que nos puedan orientar a todos los niveles ni con otros deportes colectivos que nos harán entender mejor las diferencias.
La práctica colectiva potencia las relaciones sociales, la amistad, el apoyo entre unos y otros, y otorga roles individuales dentro de un grupo que persigue un objetivo común. En definitiva, integra al individuo y le hace sentirse partícipe de algo mayor. Puesto que en el poker estamos solos, los valores anteriores no son aplicables en el ejercicio de la competición. Sin embargoexisten muchos grupos de jugadores que se asocian a la hora de estudiar el juego y forman grupos como Ffttr al que yo mismo pertenezco. La idea en principio es prepararse a nivel técnico y, desde luego, es la parte más productiva de la asociación, pero mucha gente subestima la preparación en grupo a nivel psicológico. Para entender la importancia de esto último tenemos que acudir a los deportes individuales.
Los deportes individuales afectan muy positivamente a la autoestima y la confianza, y se valoran mucho actitudes que involucran al esfuerzo, la perseverancia y la fortaleza mental. Evidentemente el deportista no se nutre simplemente de esto, las victorias se basan fundamentalmente en el dominio técnico y la práctica (tanto en entrenamientos como en competiciones), sin embargo la fortaleza mental muchas veces marca la diferencia. Hay un dicho muy común en el mundo del tenis: “si llevas a una pista a los diez mejores tenistas del mundo y los pones a pelotear en un entrenamiento, alguien que no los conozca no va a saber distinguir quién es el número uno y quién el número diez, ya que no les diferencia su capacidad de juego, sino su mentalidad en competición”. Creo que esto resume bastante bien quién es el actual número uno en ese deporte. Al comparar esto con el poker, mientras más vueltas le doy, más analogías aparecen, y esto es porque al añadir un componente de azar mayor, el impacto de los valores anteriores se torna crítico. Y solo me viene una palabra a la mente: Tilt.
Es en los deportes individuales donde quizás vemos más relevante el papel que juega nuestra mente y donde más paralelismos podemos encontrar con el poker. Sin embargo he hablado también de deportes colectivos y de la importancia del grupo, porque es ahí donde debemos acudir para ver la manera óptima de lidiar con el tilt (el problema a nivel mental más común entre los jugadores de poker). Puedes intentar trabajar en tu fortaleza mental a título particular, pero el deporte colectivo facilita enormemente esta tarea. Los jugadores de baloncesto o de fútbol se necesitan unos a otros no solo para hacerlo correctamente en la pista si no también para equilibrarse a nivel emocional: cuando juegas en equipo, si te pierdes nunca estarás solo.
Fuente: http://www.poker10.com